El dinero efectivo ha sido durante muchísimos años el principal método de pago en todo el mundo. A día de hoy, los billetes y las monedas siguen circulando por la sociedad, pero en menor cantidad que antiguamente. Llevar la cartera encima empieza a ser pesado para los más jóvenes. Puesto que lo esencial es el DNI y la tarjeta de débito o crédito, los móviles más modernos introdujeron la opción de añadir la tarjeta con la que pagamos. Así se fraguó la posibilidad de pagar con el móvil, pero, ¿qué se necesita para poder pagar desde nuestro teléfono?

¿Qué necesitamos para pagar con el móvil?

El único requisito que nuestro teléfono debe cumplir para poder pagar con él es contar con un chip NFC. Si te estás preguntando qué es el NFC, no te alarmes. A día de hoy, más del 90% de los móviles vienen con un chip NFC instalado. Así, salvo que tu teléfono tenga muchísimos años, lo normal es que tengas NFC. En cualquier caso, si vas a comprar un móvil, pide información adicional sobre el chip NFC para curarte en salud.

La tecnología NFC funciona generando un campo electromagnético de baja intensidad que los datáfonos de los comercios reconocen al instante. Obviamente, esta tecnología no solo sirve para pagar con el móvil, sino que también tiene otras muchas funcionalidades. En Koko explotamos al máximo el NFC para ofrecer al usuario una infinidad de posibilidades.

Aplicaciones para realizar pagos desde el móvil

El chip NFC no es lo único que nos va a hacer falta para proceder a pagar con nuestro teléfono. Vamos a necesitar también una aplicación que haga de intermediaria y gestione ese pago. Estas aplicaciones son gratuitas, tan solo tienes que descargarlas, iniciar sesión o registrarte e introducir los datos de tu tarjeta de débito o crédito. Tu móvil pasará a ser directamente un método de pago.

¿Y cuáles son estas aplicaciones? En primer lugar, la app de tu banco. Seguramente, tu entidad bancaria tenga un apartado en su aplicación que te permitirá configurar los pagos con el móvil. No obstante, una de las aplicaciones más conocidas es Google Pay. Se trata de una app creada para Google, pero compatible con Android e iOS. Solo tienes que identificarte con tu cuenta de Google y registrar las tarjetas que quieras añadir.

Si hemos hablado de Google Pay, no podemos dejar atrás Apple Pay. Es el sistema de pagos creado por Apple desde la época del iPhone 6. No es compatible con Android y las tarjetas de débito o crédito no son las únicas que puedes añadir: tarjetas de embarque, entradas de conciertos, entradas a otro tipo de eventos… Eso sí, muchos de estos documentos no basarán su funcionamiento en tecnología NFC, sino en un código QR o en un código de barras.

Samsung Pay y pagos online

Nos queda solo un gigante más: Samsung Pay. No puede compararse a Google Pay, pero Samsung Pay también tiene bastante importancia. Está pensado, evidentemente, para dispositivos Samsung y destaca por tener un sistema de puntos y recompensas al utilizarlo. Desde luego, es un gran aliciente para lanzarte a la moda de pagar con el móvil.

Aparte de los pagos móviles, que serían todas aquellas transacciones en las que se utiliza la tecnología NFC para efectuar la operación, existe otra modalidad de pago: los pagos online. Serían los que realizamos a través de Bizum o PayPal, por ejemplo. Para este tipo de operaciones no necesitamos chip NFC, solo deberemos contar con conexión a internet.

No podemos pasar por alto los pagos mediante tecnología NFC a través de nuestros dispositivos, los Kokos. Si habilitas la pasarela de pago, podrás lanzar operaciones a los dispositivos para que las personas solo tengan que acercar el móvil al Koko y proceder al pago. Un pago que, por cierto, podrá llevarse a cabo utilizando Google Pay, Apple Pay o Koko Payments (introduciendo los datos de tu tarjeta de la misma forma que cuando compras en Amazon, por ejemplo). Tecnología NFC y Koko, la mejor manera de trabajar.